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Platos originales que embellecen la mesa

¿Qué tener en cuenta al hacer una vajilla de cerámica? Muchos restaurantes dedican ya un espacio especial para las vajillas en las que sirven sus creaciones. Del mismo modo, en muchos hogares se acompaña la preocupación por una alimentación sana junto con el uso de vajillas artesanales. La comida es un acto social y también una celebración, y los ceramistas llevamos toda la vida creando piezas funcionales para que rodearse de objetos sea equivalente a rodearse de belleza. Todos queremos crear vajillas originales, especiales y con personalidad. En esta publicación te voy a hablar sobre las vajillas y los materiales que empleamos para ellas.

La cerámica utilitaria

El motivo de escribir este post es la cantidad de veces que hago la diferenciación entre cerámica decorativa y cerámica utilitaria en mis clases o cuando hablo sobre mis piezas. Hay muchos aspectos en los que debemos pensar a la hora de trabajar pieza utilitaria: el diseño, la funcionalidad, la ergonomía y, por supuesto, los materiales.

Con barro se puede hacer desde una delicada joya de porcelana hasta un mural de revestimiento para una fachada. Conocer la funcionalidad y el destino de nuestra obra es fundamental para plantear qué materiales emplear. En esta ocasión voy a hablar de algo que me llega de cerca. Una de las líneas de trabajo de los ceramistas puede ser la creación de vajillas por encargo. Tanto particulares como restaurantes pueden solicitarte información para crear una vajilla que se adapte a sus productos y a su estilo. En ese caso, hay ciertas cosas que deberíamos tener claras. ¿Qué tener en cuenta al hacer una vajilla de cerámica?

¿Qué tener en cuenta en la cerámica para uso alimentario? No todo vale.

Me preocupa en concreto el mal uso que veo, la mayoría de las veces por desconocimiento, de los materiales cerámicos aplicados a vajillas. Aunque hay cursos específicos sobre el tema y profesionales que se dedican a explicarlo por activa y por pasiva, aún no se tiene claro qué se puede poner en un objeto destinado al uso alimentario.

Te resumo brevemente los principales materiales con los que hay que tener precauciones:

  • Cuidado con calcas al interior o en zonas de contacto con los alimentos.
  • Cuidado con los lustres.
  • Cuidado con los vidriados no exentos de plomo en baja temperatura.
  • Cuidado con los esmaltes de cadmio y selenio.
  • Cuidado con elementos tóxicos como el Carbonato de Bario, el Pentóxido de Vanadio, el Dicromato de Potasio, las sales solubles y cosas por el estilo. Que sea alta temperatura no exime del riesgo.

Para quien quiera dedicarse a esta línea de una forma profesional y responsable, os dejo el link con la normativa del Ministerio de Consumo. Y es que no se trata de ninguna tontería, es un tema muy reglado porque sobre todo el cadmio y el plomo son elementos que pueden quedar libres y pasar a los alimentos que consumimos.

¿Por qué no usar estos materiales?

La principal razón por la que debemos abstenernos de utilizar estos elementos es porque son tóxicos y pueden pasar a los alimentos que consumimos.

Los cuencos, platos, ensaladeras, vasos y demás objetos de vajilla están expuestos a la acción mecánica de diferentes agentes que los alteran . Te cuento cuáles son los más peligrosos.

En primer lugar, los ácidos. Pero, ¿hay ácidos en la cocina? Nadie tiene ácido clorhídrico…pero todos tenemos ácido láctico, ácido acético y ácido cítrico. Leche, vinagre y limones son productos habituales que consumimos a diario y dañan los vidriados de nuestras vajillas.

Al dañar el vidriado, éste se debilita, se rompe y ahí está la gracia: los elementos que hayan quedado libres, es decir, que no están químicamente bien integrados en la red de silicatos que se crea en el horno, se pueden ir soltando y pasar a los alimentos. Los efectos pueden tardar años en aparecer, pero nadie quiere envenenarse lentamente.

Por otra parte, el agua caliente, la exposición al fuego y al microondas, el lavavajillas y la acción de los cubiertos, todo ayuda a que los vidriados se estropeen.

Los lustres y las calcas

Ahora que está tan de moda emplear el lustre y las calcas en las piezas, me gustaría advertir que este tipo de decoraciones se deben emplear con cuidado. Lo recomendado para vajillas en que se dispongan en zonas que no vayan a estar en contacto con el alimento. Para el caso concreto de los lustres de oro, plata y demás, es obligatorio ser profesionales acreditados para comprarlos y se deben firmar unos documentos informativos en los que nos hacemos responsables del uso que les damos.

Una conciencia muy reciente…

Quizá nunca hayas oído hablar de estos temas, pero es que la conciencia sobre las toxicidades en la cerámica es un tema muy reciente. En casi todas las casas hay cacharros de barro antiguos esmaltados con plomo. No será hasta la segunda mitad del siglo XX cuando empieza la preocupación por los materiales que componían los vidriados cerámicos, ya que el comercio con EEUU se encontró con la prohibición de exportar elementos que contuviesen este elemento. Hoy en día, se siguen usando en alfarería esmaltes que contienen plomo, como el 5005 de Prodesco. Sin embargo, también hay vidriados exentos de plomo, que son los que deberíamos pedir si vamos a esmaltar vajillas. Aquí os dejo un vínculo a los vidriados sin plomo de Prodesco. Mi recomendación es que antes de comprar un producto solicitéis información y descarguéis la ficha técnica.

La ficha técnica es un documento que nos permite comprobar qué materiales componen determinado producto. Vemos las cantidades, los porcentajes y las combinaciones. La ficha de seguridad es otro documento, más específico, en el que podemos ver además cuestiones fundamentales de seguridad e higiene en el trabajo.

Forma y decoración ¿Qué tener en cuenta al hacer una vajilla de cerámica?

¿Qué tener en cuenta al hacer una vajilla de cerámica? Además de los vidriados, empleados para impermeabilizar las superficies cerámicas, hay que tener en cuenta la forma y las decoraciones en relieve o texturas.

En piezas dedicadas al consumo de alimentos hay que pensar en combatir la porosidad, una de las características básicas de la cerámica, ya que puede dar problemas con las bacterias. Para ponérselo más difícil se recomienda:

  • Vidriar tanto el interior como el exterior de la pieza.
  • Utilizar pastas cerámicas adecuadas. Aquí os dejo un enlace a las pastas culinarias.
  • Para elementos que van a estar en contacto con fuego, usar pastas adecuadas y vidriados específicos.
  • Los engobes no siempre impermeabilizan.
  • Las texturas y recovecos en relieve son ideales para que se críen las bacterias. mejor superficies lisas.
  • Llevar las pastas hasta una temperatura de cocción que asegure su compacidad.
  • No usar vidriados con materiales tóxicos o con efectos que puedan provocar pérdidas en la zonas de contacto con la comida. Los efectos especiales mejor para la pieza decorativa.
  • No utilizar materiales solubles (como las sales) porque penetran en el cuerpo cerámico y luego salen con la humedad ambiente.

Vajillas y responsabilidad

La cerámica se extiende como una afición más y estoy feliz por ello. Sin embargo, las personas que empiezan no siempre reciben la formación necesaria. Dado que hacer platos y cuencos es una de las cosas más demandadas, sería muy importante que los que nos dedicamos a enseñar, tuviéramos estas recomendaciones de seguridad y salud siempre en mente.

Mi experiencia es que ni la producción cerámica ni los materiales que empleamos se perciben como peligrosos o tóxicos. Pero sí lo son. De ahí mi preocupación por controlar los residuos, la forma en que trabajo y el cuidado por hacer una cerámica respetuosa con el medio ambiente.

Por eso, si estás empezando con la cerámica y te surgen dudas sobre qué materiales comprar o cuáles son los que mejor se adecuan a tu trabajo, escríbeme y estaré encantada de ayudarte. Si lo prefieres, puedes dejar tu comentario. Me encanta que seamos cada vez más los que disfrutamos con el barro y que lo hagamos de una manera segura y respetuosa.

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